lunes, febrero 08, 2010

Desamor

Hola de nuevo...

hace mucho tiempo que no ando por estos rumbos, basicamente me he guardado todo para dejar de sentir. ¿ Es eso posible? ¿ Acaso funciona? no, ese sentimiento engrandece de una manera tan fuerte. El desamor, nadie sabe como pasa eso, es tan extraño... ¿ Cuántos golpes merece el corazón para poder despertar de ese sueño tan lindo y a la vez perverso? No son necesarios muchos, simplemente uno que haga sentirse humillado, usado, pisoteado, como una cachetada de guante blanco que viene de una forma desprevenida. Quien sabe si eso le pase a todos.
Toda persona solo ve lo que quiere ver, escucha lo que necesita oír, mira lo que el corazón envenenado le permite... Cuando se ve la verdad, ni uno mismo se reconoce; digamos que esto es un proceso de análisis y reconocimiento interno, la persona que eras antes comparada con la que eras ántes de que el sentimiento llamado amor te invadiera hasta la última parte de tu cuerpo, se llevara tu razón a descansar y te dejara alucinar en un mundo mágico que nadie comprende más que una misma. ¿ Cuánto cuesta despertar? O mejor dicho, ¿ Cuánto duele despertar a la realidad? Mucho, uno se siente vacío, que no pertenece más a lo que ahora puede ver que es real, el mundo donde todo esta frío....
Ese vacío por dentro, hace suspirar porque algo tiene que ocupar ese espacio que quedo, esos ojos no pueden reflejar una mentira porque les han quitado la venda de encima, no se sabe si se tiene corazón. Al menos yo, no se donde quedo perdido... pero, lo que sí sé, es que algun día lo encontraré, lo levantaré, lo limpiaré y lo pondré en donde pertenece. Cada día lo alimentaré, lo curaré para que poco a poco se le quite esa enfermedad tan común y con una receta que solo la dá el tiempo. Le quitaré esas ideas locas y desbaratadas con las que soñaba y se alejaba tanto de mi realidad, construír de nuevo ese hogar dentro de mí para que nada pueda pasarle, para que ese techo lo cubra de los males de la vida, para que nadie pueda abrir esa puerta a menos que se la merezca, todo para que nunca mas sufra y se vuelva a perder... Para no angustiarme... Todo lo que tengo que hacer ahora, costurar sus heridas, limpiar sus lágrimas, acariciarlo para que encuentre el sueño de olvidar, hacerlo reír para que deje el dolor a un lado. Cuidarlo hasta que pueda caminar solo. Ser su escudo para que ningún mal pueda atacarlo, llevarlo de la mano como siempre he hecho, luchar contra sus miedos, ayudarlo en sus fracasos; ayudarlo a levantarse en sus recaídas...
Todo eso tengo que hacer con mi corazón y por él, tendré que empezar de nuevo. Hasta que esas heridas desaparezacan por completo y ni siquiera quede la sombra de la persona en la que alguna vez me convertí.
Quiero ser feliz de otra manera y sé que lo lograré... Lo estoy intentando, recaigo pero no me quedo en el suelo, debo levantarme sin mirar atrás porque no quiero hundirme de nuevo. El amor es bello pero trae consigo un sufrimiento divino que hay que superar, algo que te hace vivir; pero, es tiempo de volver para centrarse en lo importante, en sueños que en mi realidad sí puedo cumplir, metas que puedo lograr y promesas que sí puedo cumplir...
Una vida que sí puedo vivir...

Gracias al amor por existir, pero hay personas que merecemos un tiempo de paz para cumplir metas y sueños, para ver una realidad que podemos pintarnos mejor cuando estamos solos... Y porque podemos amar a muchas personas de mil maneras sin tener que perder el corazón por una que nunca lo valorará....